jueves, 23 de junio de 2011

El gen que controla el esmalte dental puede revolucionar la odontología.

  Científicos estadounidenses han identificado el gen que controla la fabricación del esmalte de los   dientes, un avance que abre nuevas posibilidades para la odontología.


Aunque el descubrimiento tardará en poder ser aplicado a los seres humanos, en el futuro debe ser posible utilizar células madre de los dientes para estimular el crecimiento de esmalte nuevo, según Chrissa Kioussi, de la universidad de Oregón, una de las autoras del estudio.
Entre las posibles ventajas estarán la reparación del esmalte dañado, un nuevo concepto en la prevención de las caries y la rehabilitación, o incluso la creación de dientes de sustitución, según el estudio publicado en "Proceedings of the National Academy of Sciences" (PNAS).
El gen, denominado Ctip2, es un "factor de transcripción" del que ya se conocían otras funciones en la respuesta inmunológica y el desarrollo de la piel y el sistema nervioso, a las que se añade ahora la de fabricar esmalte dental.
"Esta es la primera vez que se halla un factor de transcripción que controla la formación y la maduración de los ameloblastos, las células que secretan esmalte", afirma Kioussi.
Los investigadores utilizaron ratones de laboratorio a los que aplicaron este gen.
Los ratones carecían de los sistemas biológicos necesarios para sobrevivir, pero permitieron a los científicos ver que tenían dientes rudimentarios listos para salir, aunque sin la necesaria capa de esmalte.
Muchas personas tienen problemas con el esmalte dental y la mayoría de las caries se originan como un agujero en el esmalte que provoca el deterioro del diente.
Hasta ahora, algunos científicos habían logrado reproducir la parte interna de los dientes en experimentos con animales, pero eran dientes sin esmalte porque se desconocía el material genético necesario para fabricar esta sustancia.
                                                                                                                                                   Dr. Jorge Norero.


No hay comentarios:

Publicar un comentario